Ciudad de México. Una fuente allegada a Los Pinos hizo notar que el presidente Enrique Peña Nieto sopesa la posibilidad de cancelar su visita a Estado Unidos, programada para el 31 del presente, luego de que su homólogo, Donald Trump, firmara dos órdenes ejecutivas decretando la construcción de un muro en la frontera con México, la ampliación de la capacidad de centros de detención para indocumentados y priorizar la deportación de inmigrantes indocumentados convictos por delitos de diversa índole.
A ello se suman las declaraciones del propio Donald Trump a la cadena de noticias CNN el martes 24 de enero por la noche, en el sentido de que la afirmación de Peña Nieto de que México no pagará por el muro, son declaraciones del mandatario para mero consumo interno.
Ante tales circunstancias la coordinadora de los diputados de Morena, Rocío Nahle García, afirmó que frente a las acciones de Trump, los mexicanos deben salir en unidad para fortalecer al Ejecutivo federal, pero exigió que éste represente dignamente a México.
“Claro que tenemos que salir en unidad, claro que tenemos que fortalecer al Ejecutivo en cualquier parte del mundo. De ahí el exhorto a (Enrique) Peña Nieto a que actúe con condura, con nacionalismo, que eleve su posición, que nos represente dignamente”, dijo en conferencia de prensa.
“Somos 120 millones de mexicanos, aquí cohabitamos diferentes ideologías, diferentes razas. Somos diferentes, pero todos somos mexicanos y tenemos que salir unidos”, agregó.
La diputada fue cuestionada sobre el apoyo que en este tema manifestó el presidente nacional de su partido, Andrés Manuel López Obrador, hacia el jefe del Ejecutivo federal, Enrique Peña Nieto.
“Es una actitud muy responsable de Morena, muy responsable de Andrés Manuel López Obrador, y esperemos que el gobierno federal, el gobierno de Peña Nieto, así lo tome”, externó.
Nahle García insistió en que los mexicanos deben salir juntos, porque no pueden quedarse viendo cómo le “dan de cachetadas” al Ejecutivo federal, “cómo a nuestro representante, a una autoridad, lo humillan en otras partes del mundo”.
El diputado Jorge López Martín, vicecoordinador de Difusión y Mensaje de la bancada del PAN, exigió al gobierno federal suspender los acuerdos en materia de explotación trasfronteriza de yacimientos de hidrocarburos, promulgados por el Ejecutivo el 18 de julio de 2014.
El legislador planteó esta medida “ante la embestida del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump”.
“La actitud hostil del presidente Trump obliga a una respuesta contundente por parte de México; si piensa Estados Unidos que no necesita del exterior, entonces que deje de explotar nuestros yacimientos petroleros y busquemos nuevos socios comerciales en ese rubro”, indicó el legislador en un comunicado.
López Martín señaló que el mencionado acuerdo contempla, en su artículo 7, que al ser localizado un yacimiento transfronterizo se establece la permisibilidad de ser explotado sin consentimiento previo de alguna de las dos naciones.
Apuntó que esto “representa una desventaja para México, ante el rezago financiero y tecnológico de Petróleos Mexicanos”.
López Martín aseveró que “las reservas de hidrocarburos sobrepasan los 283 millones de barriles de crudo y el acuerdo prácticamente deja a merced de las empresas norteamericanas nuestra riqueza en petróleo y gas”.
Señaló la necesidad de que “ante la nueva actitud del Presidente norteamericano, el gobierno mexicano suspenda el acuerdo y cancele las licencias que se hayan otorgado”.
El diputado panista planteó que “la ausencia de reciprocidad en materia de cooperación internacional pone sobre la mesa la necesidad de salvaguardar las fuentes de energía que sustentan a la economía nacional y no pueden ser entregadas a un gobierno que está dañando los intereses económicos de México y los derechos humanos de los mexicanos en aquel país”.
Sostuvo que, “de conformidad con las cláusulas contenidas en el contrato binacional, se contempla la posibilidad de dar por concluido el convenio mediante documento signado por cualquiera de los gobiernos en un lapso de 180 días”.
Que EPN reprograme su visita
Por su parte el coordinador de los diputados del PAN, Marko Cortés Mendoza, solicitó al presidente Enrique Peña Nieto que reprograme para otro momento más oportuno el encuentro con su homólogo estadounidense prevista para el 31 de enero en ese país.
En conferencia de prensa, el legislador cuestionó la decisión de Trump de formalizar la construcción de un muro fronterizo y endurecer su política migratoria.
“El Presidente de la República debería esperar un momento más oportuno en el cual no juguemos a los tiempos y las formas que el presidente Donald Trump nos está poniendo. No se vale que previo a una visita diplomática de Presidente a Presidente, se confirmen las amenazas en las que no estamos de acuerdo”, sostuvo.
Llamó al Ejecutivo federal a convocar a los Poderes de la Unión, a gobernadores y presidentes municipales, a todas las fuerzas políticas y a los sectores productivos del país, a formar un frente común y trazar una estrategia antes de realizar una visita al país vecino del norte, para defender los intereses de México.
El líder parlamentario dijo que antes de que el titular del Ejecutivo federal se entreviste con el mandatario estadounidense, debe tener una estrategia acompañada por todos los sectores de la sociedad, en donde se establezcan claramente los temas que se van a tratar y las soluciones que se esperan obtener.
Apuntó que la visita del presidente Enrique Peña Nieto a Estados Unidos, agendada para el próximo martes, es muy precipitada, poco planeada con falta de estrategia y acompañamiento.
Cortés Mendoza apuntó que se puede o no coincidir con el Presidente de la República en muchas cosas, pero “ante una amenaza externa confirmada, por responsabilidad y patriotismo, los mexicanos tenemos que cerrar filas, unirnos y respaldarnos”.
Insistió en que el titular del Poder Ejecutivo debe reprogramar su visita a la Unión Americana y dejar claro al gobierno de Donald Trump “que no tiene que ser en sus términos y en sus condiciones, porque México no es la burla de nadie y tenemos que darnos nuestro lugar”.
Anunció ocho propuestas de su grupo parlamentario para defender a México de las amenazas confirmadas del mandatario estadounidense, entre las que destacan que el gobierno federal convoque al gabinete de seguridad, a fin de estar preparados la eventual llegada de muchos mexicanos al país.
Que se fortalezca la embajada y consulados de México en Estados Unidos, para garantizar los derechos de todos los connacionales que radican en el país vecino del norte y se le solicite al Alto Comisionado para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Zeid Ra'ad Al Hussein, que se pronuncie respecto de la construcción de un muro fronterizo.
Además, plantean que el Ejecutivo federal exija al gobierno de Estados Unidos que la mitad de los bienes que le serán incautados a Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, sean entregados a la Tesorería de México, “porque aquí fue detenido y aquí cometió los ilícitos también, por lo que el país tiene el derecho de recibir al menos la mitad de los recursos decomisados”.
También que el gobierno federal realice una campaña para promover el consumo de productos nacionales y fortalecer el mercado interno, así como diversificar las relaciones comerciales con otras regiones como Europa, Asia y América Latina.
El diputado federal, dijo que también insistirán en que se corrija la “tóxica” reforma fiscal, a fin de reducir los impuestos y estimular la inversión en el país.
Contra “Ciudades santuario”
Trump había dado a conocer por la mañana que instruyó a su gobierno a que evalúe caminos para retener algunos fondos federales para las ciudades que han implementado políticas para proteger a inmigrantes indocumentados de ser deportados, conocidas como “Ciudades Santuario”.
La orden de construir el muro en la frontera sur de Estados Unidos es en cumplimiento con una de las más controversiales propuestas de campaña de Trump, y que forma parte de una serie de acciones en el frente migratorio.
Contempla la contratación adicional de agentes de la patrulla fronteriza y aumentar el número de camas en los centros de detención para inmigrantes indocumentados ubicados cerca de la frontera sur, anticipando un aumento en los arrestos a lo largo de la frontera con México.
Además se eliminará el programa de detención y liberación de inmigrantes indocumentados, aplicado por lo general a aquellos que esperan comparecer ante cortes migratorias durante el desahogo de sus peticiones de asilo.
Asimismo, Trump ordenó priorizar el encausamiento legal y la deportación de indocumentados acusados de delitos.
En una segunda orden, el mandatario estadunidense ordenó retener algunos fondos federales para las ciudades que han implementado políticas para proteger a los inmigrantes indocumentados de ser deportados, conocido como “Ciudades Santuario”.
Los gobiernos de ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Chicago y San Francisco, donde se han implementado estas políticas han dejado en claro su intención de mantenerles a pesar de esta amenaza.
El presidente de Estados Unidos también instruyó al Departamento de Seguridad Interna (DHS) a mejorar la capacidad de agentes de la Oficina de Migración y Aduanas (ICE) para arrestar, detener y deportar a inmigrantes indocumentados.
Mientras al Departamento de Estado le ordenó retener visas como medidas de presión a fin de forzar a los países a que acepten la repatriación de indocumentados convictos de crímenes en Estados Unidos.
Trump aprobó una directiva mediante la cual restaurará el programa “Comunidades Seguras”, enfocándolo en la detención y deportaciones de inmigrantes indocumentados.
Estados Unidos aplicó durante años este programa con el objetivo de que las jefaturas de policía locales cruzaran la información de personas detenidas con bancos de datos federales para determinar si eran buscadas por violaciones migratorias.
El programa fue cancelado en 2014, tras sucesivas quejas judiciales de las jefaturas de policía alegando carecer de autoridad bajo la cláusula constitucional de debido proceso, para retenerlos encarcelados hasta que fueran procesados por fines migratorios.
La administración del expresidente Barack Obama lo sustituyó con el Programa de Prioridades de Cumplimiento (PEP), que limita la transferencia de detenidos a aquellos buscados por delitos serios o que son un riesgo a la seguridad nacional.
Reconsiderar visita
El presidente Enrique Peña Nieto debe reconsiderar su visita a Washington, prevista para el 31 de enero, si se advierten señales de prepotencia o sometimiento en la reunión de este miércoles entre funcionarios de ambos países, afirmó el presidente de la Comisión Permanente, Javier Bolaños Aguilar.
Los titulares de las secretarías de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray Caso, y de Economía (SE), Ildefonso Guajardo Villarreal, se reúnen en Estados Unidos con asesores del presidente Donald Trump, para abordar temas en materia comercial y de migración, entre otros.
“Si de estos encuentros que se están dando, en este día, se percibiese una señal de prepotencia o de intento de sumisión a nuestro país, haciendo prevalecer los intereses de Estados Unidos, entonces a mí me parece que el titular del Ejecutivo federal, nuestro Presidente, tendría que considerar la visita que tiene programada a los Estados Unidos”, externó en conferencia de prensa.
El también presidente de la Cámara de Diputados afirmó que la decisión del presidente Donald Trump de formalizar la construcción del muro fronterizo, mientras los funcionarios mexicanos se reúnen con miembros de su equipo, “lastima la buena diplomacia que debe existir entre ambos países”.
“Es un anuncio que nada tiene que ver con un jefe de Estado, más bien pareciera ser un anuncio de quien quiere empezar a imponer condiciones en la construcción de una mesa de negociaciones (entre México y Estados Unidos)”, aseveró Bolaños Aguilar.
El diputado presidente expresó el respaldo institucional del Congreso de la Unión, particularmente de la Cámara de Diputados, al jefe del Ejecutivo federal.
“Debemos tener la convicción y la claridad de que el respeto a nuestro Presidente lo debemos hacer valer todos, que el presidente Peña Nieto cuenta con el Congreso mexicano, cuenta con las diputadas y los diputados de esta Cámara, que, sin ninguna duda, hacemos un solo equipo, para respaldar esto que es el primer acercamiento con nuestro vecino del norte”.
Reiteró su apoyo a la postura de los secretarios Videgaray Caso y Guajardo Villareal de que la salida de México del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) es una posibilidad, si a México no le favorecen las condiciones.
“El permanecer o no en el TLCAN no es que México tenga viabilidad a futuro o no la tenga, es decir, no se acaba el mundo si México se sale del TLCAN, se complican las cosas, sin ninguna duda, pero sí me parece que es un espacio de oportunidad”, manifestó. (Redacción)